“Si un animal está reduciendo la frecuencia cardíaca y respiratoria en una cirugía, agarro una aguja que pongo en un punto de acupuntura y en 3 segundos ese animal comienza a respirar más profundo y su ritmo cardíaco aumenta. Es más rápido que cualquier químico. Lo hice en cerdos, en vacas y podría hacerlo en humanos también en caso de emergencia”, explica el veterinario afincado en Houston, Texas, Carlos Sáenz Scott.
Carlos Sáenz lleva 30 años ejerciendo de veterinario, muchos de ellos en Texas, en Estados unidos. Pero su forma de practicar esta profesión no tiene nada...