Nos invitan a que nos vacunemos a ciegas. “Tened fe”, parecen decirnos desde los medios de comunicación tradicionales y y nuestros gobernantes. Pero lo que necesitamos no es fe con la que está cayendo, sino información. Que nos digan, por ejemplo, qué productos hay en las vacunas exprés, lo que nos están inyectando, y cuáles son sus posibles efectos secundarios.
Hablando de efectos secundarios, la Administración de Medicamentos y Alimentos (Food and Drug Administration, FDA, admite en su página oficial,posibles efectos secundarios de la vacuna COVID19. Se pueden ver en la siguiente página:
Traducidos al español serían estas:
• Sindrome de Guillain-Barré (Parálisis Facial Total)
• Encefalomielitis diseminada aguda
• Mielitis Transversa
• Encefalitis / Mielitis / Emcefalomielitis / Memigoencefalitis / Memingitis / Encefalotapia
• Convulsiones / Ataques
• Accidente Cerebrovascular
• Narcolepsia y Cataplejia
• Anafilaxia
• Infarto Agudo de Miocardio
• Miocarditis / Pericarditis
• Enfermedad Autoinmune
• Muerte
• Aborto Espontáneo
• Otras Emfermedades Desmielinizantes Agudas
• Reacciones Alérgicas No Anafilàcticas
• Trombocitopenia
• Coagulacion Intravascular Diseminada
• Tromboembolismo Venoso
• Artritis y Artralgia / Dolor Articular
• Emfermedad de Kawasaki
• Sindrome Inflamatorio Multisistémico en Niños
• Enfermedad reforzada (agudizada) por la Vacuna
En todos los medicamentos encontraremos un folleto prescriptivo en el que constan todos los posibles efectos secundarios, por muy escaso que sea el porcentaje de posibilidades de sufrirlos. Con las vacunas debería ocurrir otro tanto.
Se que no son médicos, todas esas complicaciones no son de la vacuna, las están encontrando por accidente, son respuestas de pesticidas, órganos fosforados fertilizantes y plaguicidas así como químicos prohibidos que no deberían estar presentes