Andreas Kalcker: «Tengo más de mil niños recuperados de autismo»

Kalcker no se ruboriza al decir cosas como esta. Algunos médicos entrevistados por MM del otro lado del Atlántico tampoco, lo dicen convencidos de lo que hacen. Pero no me digan que no es de locos: una sustancia, el dióxido de cloro, que cura no pocas enfermedades, algunas tan graves como el autismo. Además, el señor Kalcker no tiene un solo caso, con lo extraordinario que sería tenerlo, dice tener ¡un millar! Es como para que nuestro entrevistado, el alemán Andreas Kalcker, estuviera encerrado en un psiquiátrico. Pero ahí siguen él y su producto, él lo llama sustancia, año tras año, y cada día con más seguidores. Ahora hay 3.000 médicos de 19 países y una organización, COMUSAV, Colectivo Mundial de Salud y Vida, detrás de él. ¿Los encerramos a todos en un psiquiátrico? Aquí algo está fallando, alguien miente. Pero cómo va a mentirnos la FDA norteamericana, la EMA europea, el Consejo General de Colegios Médicos, que acaba de sacar un informe desacreditando al dióxido de cloro, aunque más que informe es un copia pega de todo lo que dicen las grandes agencias sanitarias. ¿Y por qué iban a mentirnos en Bolivia con sus estadísticas sobre el coronavirus, que dicen haber mejorado notablemente allá donde se ha utilizado el dióxido de cloro? Bolivia es el único país del mundo donde está legalizado el dióxido de cloro.

1ª parte de la entrevista: «Podría engañar a uno, pero no a los 3.000 médicos de la COMUSAV».

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“Hay muchísimos médicos despertando. Están viendo cómo están muriendo sus compañeros”.

«Hemos invitado a todo el mundo a venir a COMUSAV y hacer un debate científico, pero nadie se ha atrevido».

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MM.- En este desprecio y persecución del dióxido de cloro por la clase médica, ¿no será también que le tienen manía al dióxido de cloro porque hay mucho médico naturista que lo está recetando?

AK.- Hasta la fecha tanto los médicos naturistas como los convencionales, masajistas, etcétera, primero lo han utilizado en sí mismos o en su familia para ver qué es, como yo hice en mi perra, ¿no? Luego lo utilicé en mi familia, en mis vecinos… Y dije «guau, esto funciona». Es un proceso el aprendizaje, no aprendemos de hoy para mañana. Lo que pasa que en mi caso han sido 13 años.

MM.- Me refería a que a estos médicos igual les ha podido molestar que lo utilicen este tipo de personas y profesionales.

AK.- No, la clase médica ahora está despertando. La clase médica ha confiado en el sistema, que ahora los está abandonando dejándolos morir en los hospitales sin ninguna posibilidad. Ahora se están dando cuenta que se han anulado todos sus poderes cuando existe un epígrafe, el 37, que permite a todo médico utilizar el dióxido de cloro si no hay otra sustancia. Todo médico puede utilizarlo si tiene el consentimiento informado de la persona y cuando la persona se lo pide. Es más, si vas al médico y se lo pides tiene que dártelo porque si no puedes demandarle.

El médico es el más perjudicado porque aun siendo parte del sistema, no le han dado esta herramienta, que realmente es capaz de curar, porque hasta la fecha solo tenemos medicamentos sintomáticos. La industria le ha engañado durante años. Es más, en el famoso Manual de Merck los síndromes nunca tienen una causa conocida. No interesa ir a por la causas y esto es lo que se debería hacer. Se debería hacer una medicina más integrativa. Tenemos que ver lo que funciona de cada lado y por qué funciona, pero no podemos ponernos las orejeras del burro diciendo que algo no puede funcionar siempre. Como en España, donde tenían toda la documentación en la mesa, en el ministerio, pero en la tele salió que esto es un bulo y lo dejaron, sin hacer un solo test, ninguna comprobación ni ensayo clínico. Porque para decir que algo funciona o no funciona hay que tener ensayos clínicos.

Hace seis meses algunos españoles pidieron hacer ensayos clínicos a la AEMS y esta ni siquiera les contestó. Nos hemos dado cuenta que todas las Agencias, la AEMS, la FDA… son corruptas y están plagadas de gente, no todos, pero sí muchos que están controlados por la industria. Es así de fácil: si yo controlo al controlador, es decir, al policía, nadie me va a toser.

MM.- ¿Por qué no hay virólogos, gente especializada en esta materia, entre los que utilizan tu sustancia? ¿Por qué siempre son médicos de otra especialidad?

AK.- Pues un virólogo que me explique de dónde saca un virus su energía siendo una entidad que no come ni defeca. Y si no come ni defeca, ¿de dónde le viene la energía? Viola las leyes de la termodinámica. No lo saben. Tener un título no significa que tenga el conocimiento.

MM.- Pero ¿por qué no tienen interés en lo tuyo?

AK.- No es interés en lo mío. En Latinoamérica los hay, pero en España no porque están pensando que todo lo que les han enseñado en la universidad es lo único que existe y que fuera de esto es inexistente. ¿Y el hecho de que 10.000 personas con PCR antes y después se hayan recuperado? Los virólogos deberían ser los primeros en interesarse por esto.

MM.- Cambiando de tercio. ¿Se puede tomar sin dejar la medicación que tiene uno o ustedes aconsejan dejarla y solo actuar con lo suyo?

AK.- En 13 años no se ha visto ninguna interacción directa con ningún medicamento. Lo que se hace, por razones de precaución, es, con medicamentos como la Warfarina, que es un anticoagulante fuerte y un raticida, reducir la dosis. Me acuerdo de un caso de un general que tenía coronavirus y diabetes al que administraron de manera oral la sustancia porque tenía problemas de respiración y enseguida se encontró mejor. A los 4 o 5 días le hicieron el test y dio negativo en coronavirus y lo interesante es que tenía los mejores valores para la diabetes, así que pudo reducir sus dosis de Metformina.

MM.- ¿Me dicen que estás trabajando con Alzheimer?

AK.- El dióxido de cloro fue patentado para el Alzheimer en 2012 por una multinacional que no lo va a sacar al mercado porque la patente tanto puede ser para proteger algo como para garantizar que nadie lo va a vender. Si vas a Google Patents y escribes dióxido de cloro Alzheimer enfermedades degenerativas, lo vas a encontrar. En cuanto al Parkinson, me acuerdo que cuando estaba dando una conferencia en Valencia y después subió un señor al escenario, me abrazó y me dijo: “Muchas gracias, yo tenía Parkinson y ya no lo tengo». Pero no tengo este caso documentado.

MM.- El Parkinson se produce por neuronas que se han destruido, ¿cómo pueden volver a crecer esas neuronas?

AK.- El dióxido de cloro es una patente, la otra patente en el dióxido de cloro es la patente para diferenciación e iniciación de células madre. Es una patente china a nivel internacional, un PCR en todo el mundo. Porque han descubierto que el dióxido de cloro activa y diferencia las células madre, cosa que implicaría que una célula omnipotente es capaz de volver a crear células.

MM.- Vamos con la COMUSAV. ¿Quién la creó, como la orquestaron? ¿Pensaron que era mejor juntos para defenderse?

AK.- El tema es que el coronel Tamayo estaba en Guayaquil, Ecuador, donde hubo tantísimas muertes que no tenían ni bolsas de plástico. La alcaldesa tenía que comprar cajas de cartón para los muertos que estaban en la calle. Tamayo y su tropa tenían que recogerlos. Lo único que tenían para defenderse, aparte de un papelito que se ponían a modo de mascarilla en la boca, era dióxido de cloro, y mira por donde ninguno de sus hombres enfermó. En la ciudad hubo más de 15.000 muertos. Me pidió ayuda sobre la dosis y se la di, vía telemática. En Guayaquil fue donde los primeros médicos hicieron unos ensayos preliminares con más de 104 personas, de las que 100 fueron recuperadas en solo 4 días, eso es público. Eso está en mi página web. Luego, Tamayo se sentó con otras personas y se plantearon hacer algo para mantener todo este conocimiento para los demás médicos.

Tamayo, como buen militar que es, es especialista en organización y organizó los contactos en otros países. Los militares se conocen entre sí porque a lo largo del año se encuentran con los militares de los países vecinos… A nivel de coroneles y generales me refiero, así se logró hacer una base. Primero se introdujo en hospitales militares que no requieren una autorización de la AEMS, como en España, o la FDA, porque tiene sus propias reglas. En estos hospitales se dieron cuenta que funcionaba de maravilla, tanto que en varios hospitales se hizo obligatorio. Tuvo muchísimo éxito y ese fue el inicio. Posteriormente a esto se le han añadido cada vez más médicos no militares. En Bolivia hubo 450 policías recuperados, se habían contagiado porque la policía está muy en contacto con la población, y un médico solo, en su momento, recuperó a 450. Esta fue la base de la aprobación de la ley porque los diputados querían tener evidencias, pero son evidencias que, al ser militares, no se pueden publicar en revistas, están dentro de un código diferente. Pero son evidencias científicas, así que se hizo y la ley está en marcha. Ahora mismo hay cinco universidades utilizando el dióxido de cloro. Entre ellas la Rene Moreno, que tiene más de 100.000 estudiantes.

MM.- ¿Hay alguien intoxicado o fallecido?

AK.- En 100 años no existe ni un solo muerto científicamente demostrado. En Bolivia aparecieron sorprendentemente algunos, pero en las autopsias no les hicieron siquiera un análisis de sangre. Eran personas que supuestamente habían bebido ni se sabe. Luego hay otro caso de un niño que se ha muerto con 5 mililitros. Esa cantidad es la que le damos a un ratón de 200 gramos. Este niño pesaba 26 kilos y fue ingresado con un cuadro clínico febril, lo llevaron bastante mal al hospital. Ahora quieren hacer una caza de brujas y necesitan buscar algún que otro muerto. Tengo más de mil niños, mil, de autismo, recuperados, que lo han tomado durante muchísimo tiempo, una cantidad bastante alta, a veces demasiada. Lo han tomado durante 1 año todos los días y ninguno se ha muerto.

MM.- ¿Y que efectos ha tenido sobre el autismo?

AK.- Pues que los niños ahora son normales, pueden hablar. Está todo en la página web.

MM.- ¿Tu sustancia está cambiando el mundo?

AK.- Yo tengo muy claro lo que tengo encomendado hacer en este mundo y debo hacerlo hasta el último día que esté aquí. Es el descubrimiento más grande de la historia humana en los últimos 100 años de la medicina. Cada vez más médicos se están dando cuenta, para los nuevos hay un curso on line en la página web, y aunque dicen que no tengo ni idea, los médicos me dicen: “Tengo aquí un paciente que tiene fibromialgia  y de repente ya no lo tiene”, o que tenían otra cosa y ya no la tienen… Están despertando… Como si les hubiera dado la pastilla de oro. Muchos están alucinando con la capacidad de esta sustancia tan simple, es una molécula. Tan sumamente simple y muy parecida al agua, es capaz de eliminar bacterias, virus y hongos ,y al tiempo aportar oxígeno O2 de manera demostrable de manera irrefutable y medible y eficaz. No es un producto, es una sustancia. Yo no vendo ningún producto, no es mi fin, no busco dinero, de hecho mis patentes, tengo tres en Suiza, son gratuitas. No quiero remuneración alguna, bueno quizás algún día si viene un Pfizer o un Novartis, a estos sí quiero cobrarles. Y hay dos patentes más en vías de hacerlas, hay que terminarlas pues es un proceso más lento. Así que todos aquellos que dudan de mis capacidades científicas, que vayan intentado hacer alguna patente farmacéutica en Suiza. Hay que tener en cuenta una cosa: nadie de nosotros se va a librar del coronavirus, así que no hay más remedio que el dióxido de cloro.