La web del Comité Científico Mexicano de Investigación y Análisis ha sufrido un ataque feroz

Uno de los miembros del recién creado Comité Científico Mexicano de Investigación y Análisis, el doctor Luis Fernando Servín, nos comunica que este fin de semana realizarán otra actualización de los efectos adversos que les han enviado, fundamentalmente de México, pero también de otros países, incluido España. 

Suponemos que gracias entre otros a nosotros, MM, que no solo le entrevistamos a él recientemente sino también a su colega, la doctora Jezabel Rosales, ha habido más movimiento en torno a la idea de crear un sello, un organismo, similares a los de la norteamericana VAERS, la británica Yellow Card, etc., pero independiente, controlado solo por profesionales de la sanidad y no por gobiernos, partidos políticos y agencias reguladoras que con la pandemia se han mostrado inoperantes. Así que vista la impunidad con la que han actuado las farmacéuticas y la FDA, que era conocedora de la muerte de 1200 personas inoculadas por Pfizer con su medicamento experimental – así lo ha revelado Naomi Wolf, una de las pocas personas que ha accedido a la información facilitada por Pfizer a un juez -, se hace necesario crear nuevos organismos independientes y que determinen los casos y estadísticas reales de los efectos adversos de vacunas y medicamentos, así como los decesos que produzcan.

Eso son buenas noticias, las malas vienen dadas por que su página web www.comciencia.com fue atacada tres horas después tan solo de ser inaugurada. Es una página sencilla que cuenta con un breve cuestionario y un email para facilitar su uso a la gente. Al parecer, médicos de Guadalajara (México) que cuentan con incentivos COVID y farmacéuticos propagaron la falsa noticia de que su web estaba contaminada y hasta crearon un algoritmo con el objetivo de minar su credibilidad. «Tienen miedo de que se exponga la verdad, de que la gente hable, cuente lo que le pasó al ser inoculados con estos medicamentos. Sufrimos un ataque feroz en el momento en que empezamos a compartir nuestro link», añade el neurocirujano Luis Servín.