La doctora Teresa Forcades presentó a la Agencia Española del Medicamento, que es la que tiene que autorizar los ensayos clínicos, hacer un estudio que demostrara la eficacia del clorito sódico frente al COVID 19. Como apoyo entregó las investigaciones realizadas por un investigador norteamericano, Miller, que en el 2014 y el 2015 demostró una cierta eficacia de este producto, de manera intravenosa, frente a la ELA, una enfermedad degenerativa del sistema nervioso central. La Agencia, como viene siendo habitual, también rechazó este trabajo. ¿Qué hay de nuevo entonces? Que ahora otro laboratorio norteamericano, Neuvivo, va a fabricar de nuevo ese producto, que se llamaba comercialmente NP001 y que podría volver a salir al mercado con este mismo nombre. Así que si, como todo parece indicar, la FDA lo vuelve a autorizar, también tendrían que hacerlo aquí la Agencia del Medicamento Europea y la agencia Española del Medicamento y, suponemos, toda agencia mundial a la que se lo presenten.