La entrevista con el doctor Pedro Chávez no tiene desperdicio. La mires por donde la mires resulta inquietante e interesante, también es esclarecedora y polémica, y siempre práctica: alza la voz para que el paciente sea lo importante y se rebaje la tensión entre el grafeno y la proteíma spike. Esto que sigue quiizás les haga reflexionar:: “Nos obligamos a pensar que los LEO o Satélites de Órbita Terrestre Baja y los nanochips de las vacunas estaban conectados de alguna manera. Tal vez tuvieron que inyectar sensores nanotecnológicos a cinco mil quinientos millones de personas para completar su red de control”.
Nota: Las claves de la entrevista aparecen debajo del vídeo
«En tiempos de pandemia es cuando más satélites se lanzaron. Hasta dos mil se pusieron en órbita, y hay solicitud de licencia para volar más de cuarenta mil”
Quiero comentar un detalle porque es MUY IMPORTANTE.
Solo se está haciendo hincapié en las mal llamadas vacunas covid y los tóxicos lo llevan TODO TIPO de inyectables. TODO lo que para suministrarse necesite de un inyectable….. no sé si me explico.
Es decir….. anestesias locales (dentistas y otras), sueros fisiológicos, calmantes, insulinas, etc….. Así como colirios (ojos y oidos), cremas, lociones, etc… También desodorantes, lacas para el pelo.
Todo esto lo digo porque hay un grupo de más de 3000 personas que se dedican a analizar pedidos a demanda, entre ellos médicos, biólogos, químicos, farmacéuticos, etc…