Manuel Álvarez de Mon es uno de los hombres que mejor conoce la Justicia, cómo funciona, de hecho ha sido juez, fiscal y funcionario de prisiones, además de abogado. Manuel, ayer pudimos leer en elmundo.es que «el Tribunal de primera instancia de Bruselas ha dado este miércoles 30 días al Estado belga para que retire todas las medidas anti Covid en vigor que restringen la actividad, el empleo o la movilidad. Los magistrados dan un mes para actuar e imponen una sanción de 5000 euros por cada día de retraso«.
MM.- ¿Se acabaron en Bélgica las mascarillas, los toques de queda, los distanciamientos, las restricciones de horarios a las empresas…? ¿Los belgas serán otra vez libres?
MAM.- Parece que sí, pero ojo, basándome solo en la información de prensa, el motivo de la resolución del tribunal belga es que ha considerado que no había base legal formal en el procedimiento que empleó el nuevo gobierno. O sea, que no había una habilitación para poderlo hacer. Deduzco que más que entrar en el fondo del asunto, desconozco la legislación belga, no había base formal para aplicar unas medidas que además son las más restrictivas de Europa.
MM.- ¿Qué significa eso, que podrían tener más base legal si lo formularan adecuadamente?
MAM.- En lo que se ha basado el gobierno no tenía suficiente fundamento. Es como, por ejemplo, se pretendía regular por decreto, materia que en la constitución reserva a ley orgánica o, simplemente, a ley. Sin haber podido leer la resolución del tribunal belga, se basan en razones fundamentalmente formales.
MM.- Claro, pero dice que en 30 días tienen que eliminar todas las restricciones y medidas anti Covid…
MAM.- Si se basan en otras disposiciones tendrán que dar marcha atrás, eso es lo que se deduce de las disposiciones del tribunal belga.
MM.- ¿O sea, que no estaríamos ante una pugna entre quienes defienden l libertad de los ciudadanos y quienes defienden un determinado modelo de salud pública?
MAM.- Lo que se deduce de la información es que se trata de una razón muy importante, que es formal, no se pueden restringir las libertades así como así. Y lo que dice el tribuna al gobierno belga es “oiga, usted no ha actuado con arreglo a derecho».
MM.- Lo que temía es que esta medida no prosperaría porque recurrirían a instancias superiores y allí cambiarían el sentido de la sentencia, o que recurrirían, simplemente, esta sentencia´
MAM .- No puedo entrar más allá por desconocimiento del derecho belga. A veces nos quedamos con los titulares, pero se entra en el fondo y no es así.
MM.- En cualquier caso, unos magistrados que se enfrentan al gobierno, un gobierno además que ha adoptado las medidas más restrictivas de Europa…
MAM.- Los tribunales no pueden promulgar leyes, pero sí son quienes las interpretan y las aplican y si el poder ejecutivo en cualquier país se desvía de la legislación, para eso existen o deben de existir los jueces que deben de actuar sin presiones de los políticos. Por eso algunas veces ocurre que los políticos quieren cosas al margen de la legalidad del país y se molestan con los jueces. En España estamos viendo constantemente ataques de los políticos a los jueces cuando estos no dicen lo que ellos quieren.
MM.- Hay abogados por la verdad, que se desmarcan de las líneas rojas de sus Consejos a la hora de interpretar la legalidad de cómo se está parando el Covid, pero lo que no se ve en ninguna parte es algún tipo de asociación de jueces por la verdad. Los únicos jueces que he visto ha actuado de una manera independiente son estos de Bélgica.
MA.- Es que no deberían existir jueces por la verdad, como tampoco de Jueces para la Democracia, un juez es demócrata o no puede ser juez. Un juez lo que tiene que estar es para resolver.
MM.- Pero es que estos jueces han actuado en contra de las medidas anti Covid en un momento delicado porque parece ser que hay otra ola, en fin, nos están volviendo a meter miedo con una ola más, y cuando, sin ir más lejos, el presidente de un país contiguo, Francia, lo que ha hecho es endurecerlas al máximo,
MAM.- Eso habla muy bien de la independencia de la justicia belga. Porque aquí, en España, estamos esperando a que el tribunal Constitucional diga algo, pero aquí ya sabemos que el Tribunal Constitucional cuando entra en juego la política se calla. Estamos esperando sentencias o leyes que esperan sentencia del Tribunal Constitucional desde hace 10 años. Si no me equivoco, la ley del aborto, la ley del matrimonio homosexual, llevan años ahí, y no resuelven nada. En materia de los estados de alarma hay quien ha presentado recursos y no ha dicho tampoco nada. La justicia belga le está enseñando al tribunal Constitucional español, y lamento decir esto, lo que tiene que hacer.
Por otra parte, ayer pudimos leer en Vozpopuli que «La comisión constitucional del Eduskunta (Parlamento finlandés) frenó la tramitación del proyecto de ley del Gobierno que establece el confinamiento de la población en Finlandia, por considerarlo inconstitucional y desproporcionado». Y mientras aquí nos quedamos de brazos cruzados. Mañana hablaremos con alguien que tampoco se queda de brazos cruzados: el abogado José Ortega, no se lo pierdan.