«Argentina fue un país de experimentación, hubo 120 tipos de inóculos, y las que más se aplicaron fueron Sputnik AstraZeneca, Moderna, Jansen y la china»
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El año pasado en un juzgado federal se hizo un debate delante del juez entre miembros del Ministerio de Salud y científicos de CONICET, más médicos que vinieron con el abogado argentino Miguel Iannolfi. Y en base a la evidencia que presentaron el juez ordenó suspender la campaña de inoculación. La ministra, sin embargo, se negó a acatarlo y prosiguieron con las inoculaciones, aún siguen. El gobierno lo apeló también, y el juicio sigue adelante, y dentro de poco podrán analizar los inóculos para saber qué contienen. De hecho, ya se han detectado un montón de sustancias tóxicas en ellos. Las han descubierto en la universidad del Comahue, en el CONISET.
Esos son los prolegómenos que derivaron en todo lo que está pasando alrededor del abogado Iannolfi, al que ahora cada día llaman 20 personas para denunciar que tienen efectos adversos. de los inóculos «No puedo creer lo que le hicieron a la gente», dice, afectado. Ahora cada día habla con perjudicados de las llamadas vacunas a los que pone en contacto con la médico que trabaja con é y quien le hace una entrevista para decidir si está o no afectada. Un proceso que deberían hacer todos los médicos. «Pero los médicos no lo hacen por cobardía, por complicidad, miedo…» Iannolfi al verlos entrar y salir, caminar, detecta si quienes aseguran sentirse mal es debido a las vacunas, a sus efectos adversos. Iannofi sabe que dentro del torrente sanguíneo está circulando algo que no debería estar. y que provoca un daño en alguna parte del cuerpo. «Nosotros ofrecemos a la gente un tratamiento para que se desintoxiquen», añade, y, desde el punto de vista jurídico, su idea es que una vez agotada la vía administrativa iniciará la demanda contra los laboratorios. Ahora esto no le da plata «haces un juicio contra el Estado y no sabes que va a pasar». Su idea es que cuando lleguen a un número importante de afectados inciar una demanda penal
VÍDEOENTREVISTA AL ABOGADO MIGUEL IANNOLFI
Bon nada pueden “ pagar” los daños ocasionados por la inoculación genocida… dañan para toda la familia además de a la persona inoculada