Mientras aquí ponemos a caldo al dióxido de cloro y muchos lo comparan con la lejía, mientras sufre el desprecio más absoluto de los medios y la indiferencia de la Ciencia y la Medicina, mientras la pandemia nos obliga a recluirnos en casa a la vez que muchos mueren, lo pasan de pena en las salas UCI o salen con secuelas, y mientras cada vez hay más gente que no tiene para comer, hay una pequeña ciudad andina, San José de Chiquitos, donde han conseguido controlar la pandemia y llevar una vida normal. ¿Cómo lo han hecho? Dicen que con el perseguido dióxido de cloro. Allí todo funciona y “se respira confianza”, nos dice su alcalde, Germain Caballero, quien ha tenido la amabilidad de contarnos qué está pasando en su bonita ciudad: San José de Chiquitos, Patrimonio Cultural de la Humanidad.
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“Ninguno de los médicos, enfermeras, etc. que están en sala Covid han enfermado”.
“Se hizo un rastrillaje urbano y rural detectando que aproximadamente el 12 % de la población tenía algún tipo de afectación por Covid o era sospechoso de Covid. Eso supone más de 4.000 personas”.
“En ese punto más alto tuvimos 17 internados en sala Covid, y a partir del mes de agosto bajamos a una media de 4 a 6 pacientes, para tener 0 a comienzos de septiembre”.
“En esos foros a los que asisto escucho casos de gente que ha superado dolencias de artritis, de articulaciones, de varices, han regulado la hipertensión… No encuentro una razón para ocultar el producto”.
“Puedo confirmar que con el producto tenemos una recuperación rápida, económica, y sin secuelas”.
“El litro de dióxido de cloro nos está costando menos de 5 euros. Imagínese lo que podemos tratar con esto. Por lo menos 100 pacientes con un litro”.
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VERSIÓN AUDIOVISUAL DE LA ENTREVISTA
MM.- ¿Es cierto que ya no tienen ustedes enfermos de coronavirus?
GC.- Si bien técnicamente no tenemos pacientes con Covid 19, tanto en sala Covid como en atención domiciliaria, y que podríamos decir que es un territorio libre de coronavirus, sin duda seguimos expuestos porque nuestro municipio está sobre un corredor bioceánico que une nuestro país con Brasil, conecta toda la actividad comercial que se mueve entre Pacífico y Atlántico. También es correcto decir que se siente un nivel de confianza en la población, una mayor tranquilidad. San José ha vuelto a una casi normalidad porque tenemos actividades laborales y económicas de lunes a domingo de 6 de la mañana a 00 de la noche y los viernes y sábados hasta las dos de la mañana, con la apertura de locales nocturnos, y se permiten las actividades sociales como celebración de bautizos, matrimonios…
MM.- ¿Desde cuándo tienen este tipo de actividades sin ningún tipo de restricción?
GC.- Desde la semana pasada. San José ha seguido un desconfinamiento progresivo desde mediados del mes de junio, que es cuando comenzamos con el dióxido de cloro. ¿Por qué? Porque desde el mes de marzo estábamos en cuarentena total, con la población inmovilizada y con los efectos económicos que esto significa. Comenzamos a volver a una nueva normalidad con algunas restricciones, inicialmente, de 6 de la mañana a 13 de la tarde, con circulación restringida para vehículos y peatones. Luego, en agosto, fue hasta las 6:30 de la tarde y en septiembre, hasta las 21 de la noche. Y desde la semana pasada hasta las 00 de la noche. Viernes y sábados hasta las 2 de la mañana.
MM.- ¿Y cuándo tomaron la decisión de utilizar con el coronavirus solamente dióxido de cloro?
GC.- De inicio lo usamos en pacientes críticos desde el día 22 de junio, que conocimos el caso de un paciente que estaba en situación grave con diagnóstico para ser transferido a Santa Cruz en fase de entubación. Al no haber salas ni el espacio suficiente se recomendó usar el dióxido de cloro. Vimos la eficacia del producto y a partir de ahí decidimos protocolizarlo. El Comité de Emergencia Municipal lo aprueba el 30 de junio y el 3 de julio se protocoliza con un decreto edil que promulga el alcalde para regular la provisión y el uso terapéutico del producto. A partir de ahí vimos que era un producto factible de usar de forma preventiva porque nuestro equipo médico, el que atiende la sala Covid, comenzó a probarlo por el nivel de contacto que tenían en esta área y ninguno de los médicos, enfermeras, etc. que están en sala Covid han enfermado. Eso ayudó a que otras personas comenzáramos a probarlo también preventivamente. Yo, por ejemplo, lo hice a mediados de julio porque estaba en contacto de forma regular con los pacientes y médicos. Ahora en San José se está tomando voluntariamente. Recomendamos que lo hagan a quienes están expuestos al contacto con pacientes sospechosos o ya infectados y también a aquellos que tienen una sintomatología leve respiratoria, antes de que la enfermedad pueda avanzar.
MM.- Imagino que debió ser complicado tomar una decisión de ese tipo. Tendría presiones muy grandes para que no lo hiciera, ¿o todo fue más fácil de lo que parece?
GC.- Le voy a confesar que no fue difícil tomar la decisión porque en nuestro país se ha administrado muy mal la emergencia sanitaria. Lo peor es que nos ha sucedido en un periodo muy politizado, con el proceso electoral de renovación en la conducción política del estado boliviano, con un gobierno de transición y donde la actual presidenta en funciones, Jeanine Áñez, se habilita haciendo uso de un recurso constitucional. Así que la gestión de la pandemia ha estado calculada no solamente por la presidenta, sino por la gestión de la imagen de la presidenta candidata. Nos ha afectado como país, pero le ha afectado más al gobierno porque hizo un manejo equivocado de la pandemia debido a una mala compra de respiradores que bajó la moral al gobierno de mi país. Y en el caso nuestro, de un municipio distante a la capital, donde no hay terapia intensiva ni respiradores, ¿con qué moral podían exigirme que yo no usara un producto alternativo?
MM.- Sin embargo lo que cuentan es que tanto la ministra de sanidad como la presidenta no están de acuerdo con el uso del dióxido de cloro.¿Y sin embargo, Senado y Congreso sí?
GC.- Sí, ha habido comunicados oficiales que dicen que no está autorizado el uso del dióxido de cloro. Se hizo público, pero no fue sancionado. En él se decía que se iba a sancionar a las personas que usen dióxido de cloro o que promuevan su uso. Circuló por todos los medios, pero no fuimos notificados los alcaldes. Creo que era más con la intención de que se escuchara fuera que dentro de nuestro país, porque me parece que ahí está la conexión con algunos organismos internacionales que prohíben y siguen negando este producto para tratar pacientes con Covid 19 y otras patologías.
En el caso nuestro, hemos sido el primer municipio en usar este producto responsablemente. Indistintamente de que se hiciera pública tal prohibición, las evidencias y los resultados en San José de Chiquitos nos respaldaban para continuar, tanto es así que nosotros en el primer mes de usar dióxido de cloro promovimos una reunión para compartir nuestra experiencia con el ministerio de Salud, con colegios médicos y con el servicio departamental de Santa Cruz mostrando las primeras 18 historias clínicas de pacientes recuperados. Se mostraban placas radiográficas pulmonares, medición de oximetrías, informes de laboratorio, tiempos de recuperación, sus secuelas, pero el ministerio de Salud no asistió, tampoco el servicio departamental de salud, lo que nos liberaba de responsabilidad en caso de que quisieran sancionarnos.
Pero además, nosotros hemos aplicado el uso del dióxido de cloro concordando con todos los códigos de ética del sistema de salud de mi país. Puedo decir que es un sistema de ética a nivel mundial que consiste en usar productos alternativos siempre que genere esperanza de vida para el paciente o disminuya la condición de dolor del paciente. Eso está en lo que se llama consentimiento informado. Puedo asegurar que en España también deben tenerlo y que se usa no solo en tiempos de pandemia, sino también en cualquier periodo del año, cuando el médico tiene que recurrir a un producto alternativo para ayudar al paciente.
MM.- ¿Los ciudadanos de San José de Chiquitos que tal recibieron la idea de ponerse en marcha con el dióxido de cloro?
GC.- En una encuesta realizada por Radio San José entre más de 1.000 votantes, el 84% lo aprobó, lo que confirma que colectivamente la población era consciente de que debíamos buscar alternativas. Si hay algo que nos golpea mucho, con una población intermedia, estamos por encima de los 40.000 habitantes, es que al fallecer alguien, un familiar, un amigo, un vecino… se lastima mucho la psicología social comunitaria porque un deceso y especialmente por Covid es lamentable. Nosotros sufrimos 5 decesos en domicilio, personas que acuden al tratamiento, como decimos aquí, casero, con alguna medicina natural, y que cuando están en condiciones muy críticas quieren recurrir a hospital, y otros que han tenido enfermedades de base. Es el caso de un joven que ha tenido problemas de asma bronquial, que tuvo Covid, y que falleció rápidamente, el deceso le vino en horas, fue fulminante. Eso nos conmovió a todos y por lo tanto yo sentía el respaldo mayoritario de la población.
MM.- ¿Cuál es el pico más alto que han tenido ustedes de enfermos, contagios o decesos?
GC.- Fue en el periodo del 20 de mayo al 20 de junio, el primer mes de Covid en San José. Tuvimos cerca de 100 contagios positivos más otros que se demoraban en la devolución de la prueba. Tuvimos también 16 fallecimientos rápidos, que fue lo que nos animó a decir que si seguíamos en casa confinados íbamos a tener más bajas, por lo que decidimos cambiar de estrategia. Decidimos salir a combatir al Covid 19 y hacerlo a través de pacientes sospechosos, con sintomatología leve, moderada y grave. Se hizo todo un rastrillaje urbano y rural detectando que aproximadamente el 12 % de la población tenía algún tipo de afectación por Covid o era sospechoso de Covid. Eso supone más de 4.000 personas. Más de 850 mostraron alguna sintomatología, de los que 144 iban de moderada a grave, y esos fueron los que se atendieron rápidamente con dióxido de cloro, tanto en sala Covid como de forma ambulatoria. En ese primer mes el nivel de decesos bajó a 4, una reducción de más del 80%, de los cuales 2 eran mayores de 70 años con enfermedad de base y otras 2 por encima de 55 años, y que tuvieron tratamiento en casa.
Del 22 de julio al 22 de agosto tuvimos 2 decesos, 2 adultos mayores con enfermedades de base, y en lo que va de septiembre no tenemos ningún deceso. Y como digo, el municipio lleva en confinamiento desde junio y no ha habido un rebrote. En ese punto más alto tuvimos 17 internados en sala Covid y a partir del mes de agosto bajamos a una media de 4 a 6 pacientes para tener cero a comienzos de septiembre. Estos dos últimos días hemos tenido dos casos en la categoría de sospechosos, pero que al hacerles las pruebas dieron negativos y han sido dados de alta.
MM.- ¿Qué le dice la gente ahora, cuando le ve en la calle, con la seguridad que tienen ahora de poder caminar, trabajar, divertirse…?
GC.- La gente que lo dice abiertamente muestra su conformidad y gratitud por las decisiones que se tomaron, pero en general lo que se percibe en la población, más allá de que posiblemente hayamos entrado en una fase de inmunidad comunitaria, es un nivel de confianza, de cierta tranquilidad, la gente sabe que se siente más segura ahora que en mayo, cuando empezaron a darse los primeros positivos, y por eso está volviendo a trabajar con cierta normalidad.
MM.- ¿Quién fabrica del dióxido de cloro?
GC.- Desde el inicio tuvimos un buen proveedor y un buen equipo de asesores, primero con la doctora Karina Rivero, que ha sido la persona que nos orientó en el primer positivo, es la sobrina del primer paciente que recibió el tratamiento, por eso ella lo recomendó, nos acompañó toda esa primera fase de junio, incluso nos ayudaba en algunas brigadas y a contactar con un primer proveedor garantizado del dióxido de cloro. Desde julio venimos trabajando con el departamento de Ingeniería Ambiental de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, que están elaborando en su laboratorio el dióxido de cloro y lo están haciendo bajo recomendaciones directas de Andreas Kalcker. La encargada del laboratorio, la bioquímica Magalí Romero, tiene contacto directo con Andreas Kalcker cuando surge alguna duda. Están produciendo el dióxido de cloro para tratamiento intravenoso donde usan un agua doblemente purificada. Están usando también otro producto, tipo spray, para utilizarlo en la parte nasal.
MM.- Supongo que ahora su ciudad es un modelo para muchísima gente, no solo en su país si no fuera de él. ¿Le están llamando para que cuente usted el procedimiento que han seguido, cómo lo han hecho, cómo lo han conseguido, o la gente se mantiene indiferente?
GC.- En mi país me están llamando de diferentes partes, yo estoy recorriendo municipios, en el Departamento de Santa Cruz son 56 municipio, ya debo haber recorrido unos 20, hoy recorreré otros dos, estoy dando entrevistas a diferentes medios de comunicación de La Paz, Cochabamba, Oruro, Chuquisaca, Tarija, Potosí, he entrado en contacto con alcaldes de diferentes zonas de Bolivia, con medios de comunicación también de Argentina, Uruguay, Paraguay, Perú, Ecuador, Panamá, México, España… y lo hago con la seguridad de que la experiencia de San José de Chiquitos es útil para otras poblaciones del mundo. A partir de ahí es una obligación moral compartir la experiencia de San José, cómo hemos usado responsablemente el producto, y lo más importante es que hemos conocido al producto que en otras partes están ocultando y estigmatizando mientras yo verifico cada día más su eficacia. Sí, porque yo participo en diferentes foros y escucho investigaciones científicas de expertos y profesionales y realmente y me pregunto una vez más, cientos, ¿por qué se oculta este producto?, ¿por qué la gente lo niega si no existe ninguna contraindicación ni daño secundario? No lo entiendo, definitivamente. Creo que lo más importante en un país, en el mundo, tiene que ser la gente. Y este producto es bueno para el Covid y para otras patologías. En esos foros a los que asisto escucho casos de gente que lo viene tomando desde hace años y que han superado dolencias de artritis, de articulaciones, de varices, han regulado la hipertensión… No encuentro una razón para ocultar el producto.
MM.- Nosotros desde MM estamos intentado que las autoridades en España sean conscientes de que es un producto que necesita investigación para sacarle el mayor provecho posible, si es que lo tiene. Ustedes están demostrando que lo tiene, con lo cual, que hablen con ustedes.
GC.- Es un producto fácil de producir, de fácil acceso para la gente en términos económicos y muy fácil de aplicar, que es lo más importante. Yo he podido comparar entre dos casos en San José. Uno que no usó dióxido de cloro, y lo conozco muy bien porque es mi primo hermano, fue el primer positivo en San José de Chiquitos, quien fue llevado a Santa Cruz de la Sierra e internado en una clínica privada y estuvo 52 días en terapia intensiva entubado y luego con traqueotomÍa, pero salió de esa fase. Las estadísticas dicen que de cada 10 pacientes que ingresan en esa fase, 8 o 9 fallecen, y él fue uno de los que se salvó, pero lo hizo con secuelas, con problemas en la laringe, pues ahora le cuesta incluso hablar. Tras estar inmovilizado 52 días en coma inducido ahora no puede caminar, hace mucho trabajo de fisioterapia. Los médicos dicen que su recuperación se demorará al menos 6 meses y que no será plena. En tanto que el primer paciente que tomó dióxido de cloro en San José, un adulto mayor, de 65 años de edad, con diabetes, muy crítico, que estaba diagnosticado para ser llevado a entubación a Santa Cruz, salió de ese cuadro clínico en 4 días, el quinto fue dado de alta sin ningún tipo de secuelas. Entonces puedo confirmar que con el producto tenemos una recuperación rápida, económica y sin secuelas.
Considero que se debería regular la producción, comercialización, distribución, uso preventivo y terapéutico del producto. En mi país el Congreso ha sancionado una ley para producir dióxido de cloro, distribuirlo y usarlo terapéuticamente, pero la presidenta Áñez, considero que por un cálculo político, se ha negado a promulgar esa ley. Creo que haber dado paso a la promulgación ayudaría a que Bolivia controle mucho más rápido la pandemia, evitar más decesos y tener un producto garantizado para la gente, pues frente a la demanda, algunos aprovechan la buena fe de la gente y venden cualquier cosa como dióxido de cloro, y a veces a muy alto precio, cuando podríamos tener un producto bastante accesible a la población. Nosotros le aportamos la materia prima a la universidad y ellos ponen la mano de obra. El litro de dióxido de cloro nos está costando menos de 5 dólares, de 5 euros. Imagínese lo que podemos tratar con esto. Por lo menos 100 pacientes con un litro de dióxido de cloro. Con 120 ml estoy tratando 2 a 3 pacientes, dependiendo del nivel del cuadro clínico. Es fácil de producir, es económico y estoy seguro que puede ayudar a salvar muchas vidas.
Y cierro con algo que quiero que quede muy claro porque la gente puede confundir algunas cosas. San José no ha declarado formalmente que somos territorio libre de coronavirus. Lo que sí refleja es la baja de pacientes, de ocupación de camas, la baja en el índice de mortalidad por Covid 19. Somos un municipio que ha controlado absolutamente la pandemia. Hemos vuelto de un desconfinamiento casi total. Creo que a partir de octubre volveremos a una actividad regular de 24 horas sin ninguna restricción, pero seguimos expuestos porque hay otras poblaciones vecinas en nuestro entorno.
El 16 de marzo celebraremos el Día mundial del dióxido de Cloro. Por supuesto, excelente trabajo periodístico.
Agregame a watsap +569 8244 0526
estoy de acuerdo ,,, las terapias oxidativas estan en proceso de evaluacion , pero de manera muy positiva hasta ahora no han dado mayores complicaciones , lo cual lo pone como producto de alta confianza ….. a la dosis indicacda , con el producto bien elaborado .
Que buena noticia, gracias por hacernos saber como controlaron el Covid el tratamiento con (Dioxidido de Cloro).Ojala que entren en conciencia en toda parte del mundo y que legalicen pero ya por favor…..Ya no más muerte por Covid 19🙏
Es muy cierta la información y es muy elemental que todos adquieran en forma preventiva es también importante enviar a todos nuestros contactos para que tengan conocimiento
El CDS es 100% efectivo, es la solución perfecta y magistral para eliminar cualquier clase de patógenos! Realmente funciona, lo tengo super comprobado con todos los miembreos de mi familia, mis amigos, conocidos, y mascotas. Gracias por que el CDS vino a revolucionar el mundo hacia una mejor vida con una salud al alcance de nuestras manos!!! Gracias a Dios por todo esto!
Queda claro que la pandemia es falsa y quieren encaminarnos a una vacuna basada en ARN y que causará cambios irreversibles en nuestro ADN, para toda la población mundial, como lo afirmó Bill Gates, pero la verdad es que el covid-19 tiene una tasa de mortalidad menor a la gripe común, y además si tiene cura, tanto el dióxido de cloro como la plata coloidal son curas efectivas.
Felicito al entrevistador y entrevistado porque con veracidad aclaran las bondades de este producto (CDS), que instituciones y gobiernos en contubernio con la industria farmacéuticas quieren demonizar y prohibir esta medicina, porque ya lo es; porque ha probado su eficacia en el tratamiento y cura del Coronavirus y otras dolencias de manera contundente.
Felicito al alcalde y periodista por su valentía al publicar esta noticia.
Victor Manuel .Lima – Peru
Uso el dióxido de cloro por problemas de hipertensión que en la actualidad está llegando a los rangos aceptables y como medida preventiva contra el covid19. Afortunadamente con mis 68 años no he sido afectada por la epidemia
Es increíble como la necedad y el lucro de las farmacéuticas y los grupos de poder no permiten que se divulgue está lo opción. En Perú, hay un reportaje de la dra Rita Denegri que muestra evidencias de pacientes graves salidos de una muerte inminente. Mi hermano querido falleció en el hospital por Covid, y tuvo acceso a esta oportunidad. Le suministramos el cds pero fue de forma oral y sin los protocolos de Andreas kalcker. El tiempo juzgará a estos genocidas , al menos , si hay escepticismo, deberian permitir pruebas y estudios sobre este producto.
Yo hace 8 años que lo utilizo en forma de MMS y desde hace 8 meses como CDS. Al principio lo comentaba con mis amigos y nadie me creía por lo que deje de comentarlo. Yo vivo en España, y cuándo apareció el coronavirus, comencé de nuevo a difundirlo. He tenido algo más de éxito pero no suficiente, no obstante sigo haciéndolo intensamente a todos mis contactos, enviando estos vídeos. Yo creo que es una labor de difusión lo que tenemos que hacer todos los que creemos en ello. Yo tengo confianza en que lograremos que la gente lo use y consigamos parar esta terrible situación. Hay que apoyar a la COMUSAV y difundir sus progresos. Ánimo vamos a lograrlo.
Magnifico reportaje,con magnifica entradilla.
Con periodistas como usted aun hay esperanza
Muchas gracias
Excelente información y a romper paradigmas y aplicar alternativas que funcionan.
Magnifico reportaje,con magnifica entradilla.
Con periodistas como usted aun hay esperanza
Muchas gracias