“Cuando caigas al pozo, no nades hacia abajo” me dijo una vez mi elocuente abuela que, recién terminada la guerra civil española, enviudó con tres hijas siendo todavía demasiado joven. Viene esto a colación corrida de una frase que leí en un suelto referido a la vida, firmado por Marcus du Santuoy (el paisano que demostró que -la simetría es una necesidad muy evolucionada-): “Somos matemáticas hechas carne. Eternos y mortales a la vez.” Lo de parecernos e imitarnos en lo bueno y en lo malo, de forma que los números nos obliguen a ser estadística, parece ser que en nuestro país no tiene la lectura política pertinente. Los de VOX, esa banda incorregible a la que la democracia, que ni les interesa ni respetan, ha aupado en cifras hasta el Congreso, han puesto en boca de un aristócrata, tramposo con Hacienda, una interpretación absurda de las palabras de una ministra y las ha llevado a la categoría de trending topic en twitter para hacernos simétricos con su discurso. Un retrógrado discurso que en las últimas elecciones sorprendió con 52 representantes dispuestos a remar contracorriente o a nadar hacia el fondo con el NO de plomo por bandera. Ese falsario sujeto batallador, que algunos no dudaríamos apodar como “Embarroso de los Chorreos en el marquesado de Valtierra”, una vez más, ha intentado confundir a los suyos y a los demás con otra de sus grandes y mentirosas chorradas aristocráticas, fabulando un petardeo sobre la interpretación de unas palabras de la guerrera ministra Montero, llamada Irene que, en griego para su desconsuelo gubernamental, significa Paz. En las guerras de esta mujer con más detractores que defensores, (muy bien ganados ambos a pulso), este low cost demagogo de conveniencia, ha enfangado de interés mediático la INFUNDADA ACUSACIÓN DE PEDERASTIA. El marido de la -espinosa cubana cienfueguera de los pollos fritos- ha llevado en volandas de la falsedad la petición del cierre del Ministerio de Igualdad y el cese de la Ministra. Todo, en un clima de sobreactuación sobre una clarísima mentira con tergiversación incluida, y sacando de contexto torticeramente por los pelos del sobaco las poco afortunadas retoricas frases de la de la Paz peleona. Está claro que al “embarrador de los chorreos” no le gusta la igualdad, y que la alta alcurnia de su apellido lo separa de nosotros los pobres mortales de pacotilla y gleba. Está claro que su aviesa intención política forma parte del ideario troglodita legitimado por las urnas que este tipo pretende. Está claro que sus parroquianos querrán justificar con más “farfolla mOlona” esta, su última propuesta tan demencial como fullera. Lo que no está claro es que las buenas gentes, que no son sordas en su mayoría numérica nacional, hayan escuchado la intervención de la ministra y escuchen la aberración bribona y mentecata de un “personajeta” de este calado, a quien con nuestros impuestos pagamos el sueldo y los medios dan ventana, no hayan sentido una repugnancia más que infinita y eterna. El Boinas me recordó, quitando virutas al asunto que le aburría el codo en la barra, con un trago largo y apurado sin paladear, la famosa frase de Camus: “Toda forma de desprecio, si interviene en política, prepara o instaura el fascismo.”
¿Los de VOX..? Y los de todo el arco político vendido a la Agenda 2030, el discurso derecha versus izquierda está muerto. Las élites y sus esbirros políticos contra el pueblo/los pueblos, esa es la realidad.