NOTA: La entrevista en vídeo está más abajo
Asombroso estudio el desarrollado por la doctora Patricia Callisperis y el bioquímico Raúl Pineda, entre otros. La materia: tres pies de diabéticos que iban a ser amputados, a criterio de sus médicos.
“Cada 30 segundos se amputa un pie de diabético en el mundo”, señala la doctora boliviana para que nos demos cuenta de la dimensión del estudio realizado por ellos y que ha permitido que tres personas eviten la amputación de sus pies.
¿Y con que han conseguido este significativo éxito médico? Con el dióxido de cloro, el polémico biocida que muchos confunden con la lejía y cuyas propiedades, visto lo visto, saltan a la vista. El ClO2, al que la FAD norteamericana acusa de ser tóxico, sin prueba alguna que soporte dicha opinión.
“El objetivo del estudio con pies de diabéticos no era ver el comportamiento de la glucosa, pero sorprendentemente ha mejorado también”
“El ClO2, que utilizamos vía oral y dermatológica, entra en zonas profundas de la piel, llega a la hipodermis, lo que permite una desinfección acelerada de las zonas dañadas»
Hay que hacer un homenaje a Jim Humble como el divulgador pionero del dióxido de cloro para el tratamiento de múltiples dolencias y enfermedades.